Tengo la enorme satisfacción, de iniciar este blog que se ha creado como un esfuerzo conjunto de El Último Elefante y mío. En este espacio desahogaremos nuestras quejas en contra del gobierno, la sociedad y lo que se vaya sumando. Seguramente nuestras opiniones serán diametralmente opuestas en muchos temas, y eso vuelve el asunto más interesante. La difusión de este blog, el darnos a conocer, será misión de mi compañero, les aviso que soy antisocial y eso no va a cambiar.
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Es hora de entrar en materia. La verdad es que el "gasolinazo" me preocupó bastante, pero más todavía me preocupan los medios masivos de comunicación. En concreto, las dos grandes televisoras, quienes por conducto de sus respectivos voceros patalean sin cesar por la afectación que han sufrido sus intereses con motivo de la reforma electoral. Así es, recordemos bien como hasta antes de que dicha reforma entrara formalmente en el proceso legislativo, las televisoras pugnaban fervientemente por un cambio en las leyes, para que las campañas fueran más cortas, y los costos de la democracia menores. Su deseo se cumplió, y el legislativo a través de la cámara alta decidió entrarle al toro por los cuernos. Evidentemente, un renglón que no podía pasarse por alto, era el de los insultantes costos de las campañas mediáticas de los partidos políticos y sus candidatos en la radio y televisión. Pero esa clase de reforma no les gustó a las televisoras, porque las afectaría económicamente en gran medida.
Así las cosas, los noticieros estelares del duopolio televisivo han enfocado sus baterías a un objetivo: convencer al auditorio que la reforma electoral es maligna, que fue producto de una negociación paralela a la reforma fiscal, y que dicha reforma fiscal, que tiene como punta de lanza el aumento a las gasolinas, producirá ineludiblemente una inflación estratosférica en todos los productos de la canasta básica. En mi opinión el que más ha insistido en este punto es Javier Alatorre en su noticiero "hechos". Lo he visto durante toda la semana, recalcando una y otra vez sin cesar que el "gasolinazo" impactará gravemente en la economía de todos.
Señores, ciertamente el aumento de las gasolinas afectará nuestros bolsillos, y no estoy de acuerdo con ello. Pero en nada contribuye a paliar los efectos de la miscelánea fiscal (porque no es reforma realmente), que las televisoras quieran vengarse de los legisladores llevándonse al país entre las patas.
EL PESIMISTA HORMONAL
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